63 Todos sabemos que la inteligencia artificial generativa no es cosa del futuro. Y, desde hace unos meses, tampoco es solo cosa de los smartphones de alta gama. Al menos no desde que OPPO lanzase al mercado la serie Reno12, la primera de gama media que incluye esta tecnología. Una tecnología que, a priori, podemos pensar que no necesitamos pero que, una vez probada, no querremos renunciar a ella. En Electromarket hemos probado durante unas semanas el OPPO Reno12 Pro 5G, el hermano mayor de la serie. Un teléfono que, aparte de la IA, nos ha conquistado por algún otro aspecto que explicaremos a continuación. ¿Diseño? ¡Diseño! OPPO cuida los detalles. De esto no hay duda. Y este modelo no podía ser la excepción. Nada más abrir la caja, que sigue la línea de siempre, nos encontramos con un dispositivo suave al tacto y con un buen agarre, aunque algunas veces escurridizo por la parte trasera. Una parte trasera que, en nuestro caso, estaba dividida estéticamente en tres: una zona mate, más grande; una franja horizontal fina, en la que está el logotipo de OPPO y, debajo de ella, en la parte inferior, una zona en brillo. La verdad es que este rasgo estético no me ha terminado de convencer, aunque, en términos generales, me ha parecido un teléfono elegante. Lo que sí me ha convencido, y creo que está bien solucionado, es el módulo de cámaras que, a diferencia de otros modelos, me parece más discreto, más sencillo, con un tamaño más adecuado y, por tanto, más afín a mis gustos. El dispositivo está disponible en dos colores (Nebula Black y Nebula Silver) y cuenta con un cuerpo delgado y ligero. En concreto, estamos hablando de un teléfono que mide 161,5 x 74 mm, que tiene un grosor de 7,40 mm y que pesa tan solo 180 g (las medidas pueden variar ligeramente en función del color escogido). Estos números hacen que nos encontremos, en la mano, con un smartphone ligero. Y eso se nota desde el primer momento. En el lado derecho, como suele ser tradición, están el botón de encendido/apagado y los botones para subir y bajar el volumen (un pelín arriba para manos como la mía y para poder tener un buen agarre). Nos despedimos definitivamente del jack para los auriculares. Miramos ahora el teléfono a la cara. En la parte delantera nos encontramos con una pantalla de 6,7”AMOLED flexible con cuatro lados curvos de la misma altura. La ratio pantalla-cuerpo es de 93,5 %, certificación HDR10+ y resolución FHD+. La tasa de refresco, asimismo, es de 120 Hz. Así, si bien nos encontramos con una pantalla que, a priori, podría parecernos más o menos estándar, la verdad es que, en el desempeño, funciona muy bien. La pequeña curvatura que tiene, su correcto funcionamiento a pleno sol o los colores vivos que proporciona, nos permiten disfrutar de una experiencia satisfactoria en prácticamente todas las situaciones. Una de las grandes bazas de este modelo, y que le da un plus respecto a otros de la gama media, es que la pantalla está protegida con vidrio Gorilla Glass Victus 2, el vidrio más resistente utilizado en un teléfono de la serie Reno, lo que nos ofrece una mayor seguridad y protección ante caídas, arañazos y dobleces. De la pantalla, también destaca la tecnología Splash Touch de OPPO, que permite un mejor control de la misma, aunque tengamos las manos húmedas o en caso de que se moje la pantalla (incluso con aceite). Cuenta, además, con certificación IP65, ofreciendo protección frente al polvo y agua. Asimismo, la compañía asegura que, si el dispositivo está boca abajo, puede soportar la presión equivalente a ser atropellado por un vehículo de 3,2 toneladas, que aguanta humedades y temperaturas extremas. Esta parte, hemos considerado que es mejor que la pruebe el usuario. Rendimiento Gracias a la capa de personalización ColorOS 14.1, tenemos un sistema fluido, que se puede adaptar a nuestras necesidades en bastantes aspectos (no solo aspectos técnicos sino también estéticos). Entre algunas de sus ventajas, encontramos la tecnología Smart Touch, File Dock o el Phone Link. Cuenta, asimismo con un MediaTek Dimensity 7300,‘tuneado’ especialmente para este dispositivo bajo el nombre Energy, que nos permite un uso medio del dispositivo para nuestro día a día. Asimismo, los 12 GB de memoria RAM (UFS 3.1 y ampliable 12 GB más) y los 512 GB de ROM nos aseguran tener espacio, y memoria, en prácticamente todas las situaciones que tengamos. Asimismo, el motor RAM-Vita mejora el uso de la RAM, y permite tener aplicaciones en segundo plano funcionando hasta 72 horas sin interrupciones. Entre otras funciones, la compañía destaca BeaconLink, que permite realizar llamadas de voz de dispositivo a dispositivo a través de Bluetooth en escenarios incomunicados. La idea está muy bien (sobre todo para momentos en los que no tenemos cobertura, como en emergencias o festivales), pero, por ahora, solo puede utilizarse con otros teléfonos OPPO que dispongan también de la función. Sin embargo, un pequeño punto negativo sería la cantidad de bloatware, o software de relleno, que incluye de serie. Vamos a perder algo de tiempo borrando esas aplicaciones (principalmente juegos) que se nos han instalado nada más encender el teléfono, pero eso será solo una vez. Y relacionado con el rendimiento, no podíamos pasar por el alto la batería del Reno12 Pro 5G. Con 5.000 mAH, y soporte de carga rápida SUPERVOOCTM de 80 W, OPPO asegura que puede cargarse del 1 % al 49 % en 18 minutos, y al 100 % en tan solo 46 minutos. La función BeaconLink permite realizar llamadas de voz de dispositivo a dispositivo a través de Bluetooth en escenarios incomunicados
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